Publicado, 8/18/2024
Desde su llegada al poder, el gobierno del presidente Gustavo Petro ha estado rodeado de polémicas y acusaciones, la implementación inescrupulosa de las llamadas bodegas digitales como maquinaria propagandística ha sido una de ellas. Teniendo como principal objetivo manipular la opinión pública a favor del gobierno, ocultar escándalos de corrupción y atacar a los críticos y opositores al gobierno del “cambio”. Siendo el exsenador y ahora director de Prosperidad Social, Gustavo Bolívar, uno de los principales auspiciadores en la implementación de estas controvertidas estrategias de comunicación al mejor estilo de los Nazis. Uno de los que en su momento acusó a Gustavo Bolívar de estar directamente involucrado en la creación y activación de bodegas digitales para la desinformación y matoneo, fue el representante a la Cámara por el Pacto Histórico, Agmeth Escaf, quien en entrevista exclusiva con el periódico El Tiempo, acusó a Bolívar de utilizar su influencia para coordinar ataques en redes sociales contra sus oponentes políticos e incluso dentro de su propia coalición. Según Escaf, Bolívar "se sienta a hablar con todos los matoneadores de las redes sociales, que son sus amigos, quienes se accionan en el momento en que él les dice". Estas bodegas, compuestas por seguidores fieles y creadores de contenido político como Laura Daniela Beltrán (Lalis) o Walter Rodríguez (Wally), quienes casualmente hoy son contratistas del Estado, operan como un ejército digital listo para atacar a quienes se atrevan a cuestionar la narrativa oficial del Pacto Histórico. No obstante, y pese a las críticas Gustavo Bolívar ha defendido abiertamente el uso de recursos estatales para contratar influenciadores (Bodegas), con el objetivo según el de promover los logros del gobierno y combatir lo que él denomina "calumnias de la oposición". El 14 de agosto, exsenador hizo un llamado público a través de su cuenta de X para reclutar más influenciadores que apoyen la agenda del presidente Petro. En su mensaje, Bolívar detalló cuatro objetivos clave para estos contratados: desmentir las acusaciones de la oposición, educar al público sobre temas que según él son tergiversados por algunos medios, comunicar los logros del gobierno y difundir información sobre convocatorias para ayudar a la población vulnerable. Esta estrategia ha sido vista con preocupación y crítica desde diferentes sectores de la sociedad colombiana. Debido a que la contratación de influenciadores, lejos de ser una herramienta para la transparencia y la educación pública, parece estar diseñada para crear una narrativa favorable al gobierno, incluso cuando esta distorsiona o ignora la realidad de los hechos, tal cual como lo hemos visto en el caso de los hechos de corrupción que han sacudido al gobierno del presidente Gustavo Petro. La campaña para desvirtuar las investigaciones de corrupción Según un informe publicado el 6 de junio de 2024, el gobierno ha redoblado sus esfuerzos en las redes sociales para contrarrestar las investigaciones que vinculan a altos funcionarios con irregularidades en la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD). El presidente Petro, en lugar de enfrentar las acusaciones de manera directa, ha optado por señalar que estos escándalos son parte de un "golpe blando" orquestado por sus adversarios políticos. Entre el 27 de abril y el 27 de mayo de 2024, Petro hizo 995 publicaciones en X referidas a este supuesto golpe, utilizando una retórica que busca radicalizar a sus seguidores y deslegitimar a las instituciones que investigan las irregularidades de su administración. En particular, el 1 de mayo, durante una marcha en su apoyo, Petro publicó 109 trinos, algunos de los cuales incluían imágenes generadas por Inteligencia Artificial para amplificar el impacto de su mensaje. Estos esfuerzos no son incidentales ni espontáneos. Detrás de cada tuit, retuit y video compartido por el presidente y sus aliados, hay una estrategia coordinada que involucra a bodegas digitales, influenciadores y congresistas del Pacto Histórico. La herramienta de escucha social YouScan reveló que estas bodegas han estado particularmente activas, promoviendo hashtags como "#YoSoyDefensaDePetro" y "#GolpeBlando", que han logrado miles de menciones, muchas de ellas provenientes de cuentas en países tan lejanos como Angola, Tanzania y Bangladesh. De las 145,700 menciones del primer hashtag, solo 44,500 se originaron en Colombia, lo que sugiere un esfuerzo concertado para manipular la conversación en las redes sociales a nivel global. La situación es aún más preocupante si consideramos que estas prácticas no se limitan a Colombia. La presencia de cuentas en países extranjeros, como Rusia e Irlanda, que participan activamente en la promoción de hashtags pro-Petro, sugiere una red de apoyo internacional que busca influir en la percepción global del gobierno colombiano. Este tipo de manipulación, aunque no es exclusiva del gobierno de Petro, es particularmente alarmante dado el contexto de las acusaciones de corrupción y las crecientes tensiones políticas en el país.