Insólita respuesta de Francia Márquez en debate de control político: “Eso ya no es problema mío”

La vicepresidenta de Colombia, Francia Márquez, dejó atónito a propios y extraños con su insólita respuesta durante un reciente debate de control político en la Comisión Primera de la Cámara de Representantes. La también ministra de la igualdad en lugar de ofrecer una explicación coherente y responsable ante la falta de respuestas a un cuestionario clave sobre la baja ejecución presupuestal del Ministerio de la Igualdad, Márquez optó por una respuesta que muchos consideran como irrespetuosa e irresponsable: “Eso ya no es problema mío”. La sesión, que tuvo lugar el 21 de agosto de 2024, tenía como objetivo primordial analizar el proyecto del Presupuesto Nacional de 2025, un tema de suma importancia para el país. Sin embargo, lo que quedó grabado en la memoria colectiva no fue el presupuesto, sino la increíble justificación de la vicepresidenta por no haber entregado a tiempo las respuestas solicitadas por los congresistas. Según Márquez, la información requerida fue enviada por correo electrónico a la Comisión, pero el mensaje “rebotó” en dos ocasiones, dejando a los legisladores perplejos y sin los datos necesarios para realizar un análisis informado. “Lo que aquí se ha mencionado no es cierto. Quiero dejar la constancia de que no es cierto que como Ministerio de la Igualdad no se haya dado una respuesta. Aquí está la constancia de que al correo que tenemos de esta Comisión se envió el día ayer, a las 9:22 de la mañana, la respuesta al cuestionario. Que rebotó. Dos veces lo mandamos. Rebotó. Eso ya no es problema mío, ni del Ministerio”, afirmó Márquez con una aparente serenidad y prepotencia. Ante la evidente frustración de los congresistas, la vicepresidenta continuó: “Toca revisar qué pasó con eso, pero no se puede decir que no respondimos. Eso no es cierto. Soy respetuosa de la institución, del Congreso. Me citaron. Aquí estoy presente”. Esas palabras, sin embargo, no fueron suficientes para calmar las aguas en el recinto. De hecho, parecieron echarle más leña al fuego. El representante Hernán Cadavid, del Centro Democrático, no pudo contener su indignación y acusó a Márquez de no entender el respeto ni las funciones que le corresponden. “Claramente, usted, señora Francia Márquez NO entiende de respeto ni mucho menos de sus funciones. Usted viene al Congreso a responder; acá no está en la sala de su casa ni en una reunión de su partido. ¿No pudo no contestar un cuestionario?”, expresó Cadavid a través de sus redes sociales, reflejando el sentimiento de muchos de sus colegas. La representante Catherine Juvinao del partido Alianza Verde también criticó la actitud de Márquez, calificándola de irresponsable. “Lamento que la vicepresidenta nos haya respondido aquí en la Comisión Primera que no es problema de ella asegurarse que lleguen las respuestas de proyección presupuestal para esta cartera, la misma que está bastante comprometida”, sentenció Juvinao. Además, subrayó que el Ministerio de la Igualdad, bajo la dirección de Márquez, es una de las carteras con menor ejecución presupuestal, lo que añade un peso aún mayor a la situación. Pero el espectáculo no terminó ahí. La sesión en la Comisión Primera, que debía ser una discusión seria sobre el presupuesto de varias carteras del Gobierno, se vio ensombrecida no solo por las respuestas de Márquez, sino también por la ausencia de la mayoría de los ministros citados, incluyendo al ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla. Solo la ministra de Justicia, Ángela María Buitrago, y la propia Francia Márquez hicieron acto de presencia, aunque esta última, como se ha detallado, dejó mucho que desear en cuanto a su desempeño. El resultado de todo este despropósito fue la aprobación de una proposición para aplazar el debate sobre el presupuesto, dando tiempo a que los integrantes de la Comisión puedan estudiar la respuesta de cada entidad, si es que estas llegan a aparecer. La ausencia de respuestas claras y la falta de seriedad en la gestión de los asuntos del Estado no solo generan descontento en el Congreso, sino que también ponen en peligro la adecuada planificación y ejecución del presupuesto nacional.