Publicado, 3/11/2024
En el convulso panorama político colombiano del año 2023, la confrontación entre la congresista Catherine Juvinao y la fiscal Angélica Monsalve escaló a nuevas alturas, envolviendo a ambas figuras en una batalla legal por injuria y calumnia ante la Corte Suprema de Justicia. Todo comenzó con la filtración de una serie de videos que desataron una tormenta mediática. La congresista Juvinao acusó a la fiscal Monsalve de grabarla sin su consentimiento, violando su privacidad y manipulando la información. Sin embargo, la fiscal contraatacó presentando pruebas que sugerían lo contrario: un video en el que Juvinao parecía estar consciente y de acuerdo con la grabación. El video en cuestión muestra una conversación entre la fiscal Monsalve y Juvinao, en la que se abordan temas sobre las aspiraciones políticas de esta última. En un momento del video, la fiscal pregunta a Juvinao sobre sus planes futuros, a lo que Juvinao responde de manera afirmativa, expresando su deseo de convertirse en una destacada parlamentaria y posteriormente retirarse para descansar en una isla frente al mar, y que ya había calculado fríamente que sería en 16 años más. La disputa se intensificó cuando la fiscal Monsalve denunció formalmente a Juvinao ante la Corte Suprema de Justicia por injuria y calumnia, presentando capturas de pantalla de conversaciones y el video original que contradecía las afirmaciones de la congresista. Este enfrentamiento legal arrojó luz sobre una serie de acusaciones cruzadas entre ambas partes, incluyendo a otras figuras políticas como la representante Katherine Miranda. La controversia se amplificó aún más con la publicación de un video por parte de la fiscal Monsalve, mostrando una aparente camaradería entre ella y Juvinao en el pasado, lo que contradecía las acusaciones de la congresista sobre una grabación ilegal. La revelación de este video desencadenó una nueva ola de intercambio de acusaciones públicas entre ambas partes, con Juvinao defendiéndose y acusando a la fiscal de abuso de poder. En medio de este escándalo político, la opinión pública colombiana se vio envuelta en una intriga que revelaba las tensiones y rivalidades dentro de los círculos políticos del país. Mientras tanto, la Corte Suprema de Justicia se preparaba para abordar este caso, que prometía arrojar luz sobre los entresijos de la política y la justicia en Colombia. En última instancia, la disputa entre Catherine Juvinao y Angélica Monsalve no solo destacó las luchas de poder dentro del sistema político colombiano, sino que también planteó interrogantes sobre la integridad y la transparencia en el ejercicio del poder judicial y legislativo del país.